Pedro de Valdivia tendrá proyecto de vivienda social

* Hace 14 años la Cooperación Italiana compró un predio de 10,9 hectáreas para vivienda social. El gobierno todavía no levanta los 500 departamentos a que se comprometió.

Uno de los sectores con el suelo más caro de Concepción, el exclusivo barrio Pedro de Valdivia, tendrá a contar de 2007 no sólo protocolo de acuerdo, en que se compromete a ejecutarlo.
Ese mismo año un particular, Juan Faúndes Sanhueza, descendiente de Thomas Sanders, reclama ante los tribunales la propiedad de este paño. El litigio que recién concluyó este año fue favorable al Serviu.
Ayer, el seremi de Vivienda, Carlos Arzola Burgos, en una reunión con dirigentes sociales y vecinales de Pedro de Valdivia Bajo les reiteró el compromiso del gobierno de que se ejecutará un plan integral de mejoramiento, lo que incluirá pavimentación de calles y radicación definitiva para las 3.500 familias que hoy viven entre el Puente Viejo y La Mochita.

No a campamentos

La presidenta de la Junta de Vecinos número 32 de Pedro de Valdivia Bajo, Liliana Montecinos Alarcón, señaló que llevan 14 años esperando que se concrete este proyecto, en que acusan que el gobierno ha recibido presiones para que no se concrete.
Sin embargo, la dirigenta dijo confiar en la palabra de la Presidenta Bachelet, para que construyan las viviendas en el terreno de La Mochita.
Advirtió que las 3.500 familias de ese barrio no aceptarán soluciones distintas a la radicación definitiva. No quieren que se repitan los campamentos “provisorios” como los que construyó la década pasada el Serviu en “La Pera” para las familias de la Costanera.
La dirigenta vecinal afirmó que en los últimos meses se ha avanzado en la planificación de este proyecto, para identificar a las familias que requieren una vivienda definitiva y poder reordenar el barrio, que esperan esté consolidado al término de este gobierno.

“Una barbaridad”

No todos están felices con el proyecto Serviu. El presidente de la agrupación de vecinos de Pedro de Valdivia, Claudio Sáez Fuentes, señaló que mantienen su opinión de que se trata de “la barbaridad más grande que se le puede hacer a la ciudad de Concepción”.
Lamentó que su propuesta de destinar esas 10 hectáreas a construir un parque no hayan sido escuchadas por el gobierno y que ni siquiera hayan contado con el apoyo de la alcaldesa Van Rysselberghe. Sáez añadió que no están en contra de que se entregue una solución habitacional para las familias más modestas, sólo critican que se destine para eso un espacio con una vista privilegiada sobre el Biobío.
El dirigente, quien es rector del Instituto Virginio Gómez, señaló que los vecinos de Pedro de Valdivia volverán a representar sus inquietudes a la autoridad, porque, insistió, no están por la segregación social, por el contrario, opinó que hoy el gobierno dispone de los recursos para dar viviendas “dignas” a las familias.

*Diario El SUR, jueves 14 de septiembre de 2006

A fines del año pasado

Acuerdo “secreto” paró proyecto en P. Valdivia

* La alcaldesa aseguró que los 500 departamentos sociales no se van a construir frente al exclusivo barrio de Pedro de Valdivia.
* Dirigenta vecinal Sonia Torres advirtió que peleará hasta el final por sus vecinos. “Llevamos 50 años esperando esta solución”, dijo.

Por Nello Rolleri Veloso.

Una de las polémicas preelectorales más intensas que se registró el año pasado en Concepción fue el proyecto de construcción de 500 departamentos sociales en un terreno Serviu de 10,9 hectáreas ubicado a la orilla del río Biobío, entre La Mochita y Sanders.
La discusión la lideró el seremi de Vivienda de la época, Aldo Ramaciotti, quien señalaba que el proyecto se ejecutaría pese a la oposición de los vecinos del sector acomodado de Pedro de Valdivia.
El presidente de la Cámara de la Construcción de la época, Jaime Peña, en tanto, acusaba que la iniciativa “hipotecaría” al sector.
Hoy, a casi un año de esa discusión, ante el relanzamiento por parte del gobierno de un plan para Pedro de Valdivia Bajo, en el marco del programa “Vivo mi barrio”, se conoce que en diciembre del año pasado se acordó “parar” el proyecto original, de los 500 departamentos, por parte de la alcaldesa Jacqueline van Rysselberghe y el ex seremi Ramaciotti.
La jefa comunal señala ayer que este acuerdo no se hizo público porque se trataba de una época electoral, aunque desestima calificarlo de “secreto”.
Pese a que el año pasado no se abanderizó con ninguna de las partes, explica que acordaron detener la iniciativa simplemente “porque el proyecto del Serviu para Pedro de Valdivia Bajo era malo”.
Consistía en colocar una hilera de bloques de departamentos, en una aglomeración que no constituía un barrio y que no beneficiaría a sus ocupantes.
El acuerdo fue suspender ese proyecto e iniciar una serie de estudios y catastros, que actualmente está ejecutando el Minvu, para una vez logrado un diagnóstico se creara una mesa de trabajo para definir qué se hará con este terreno de 10,9 hectáreas.
La alcaldesa advirtió, además, que el litigio por la propiedad de ese terreno no ha terminado, porque aunque hay una sentencia de primera instancia a favor del Serviu, todavía no está a firme y puede ser apelada.
Consultada por la donación que hizo el año 1992 la Agencia de Cooperación Italiana, que compró ese terreno para fines sociales, Van Rysselberghe dijo desconocer ese acuerdo y si existían obligaciones para el Estado chileno.
Respecto a la solución definitiva, la alcaldesa dijo que lo que está claro “es que no se construirán allí 500 departamentos”. En su opinión, la solución debe ser una salida intermedia, en que se construya un número menor de viviendas de buen nivel con subsidio habitacional para un grupo de familias de Pedro de Valdivia Bajo y que otra parte del terreno se destine a áreas verdes y parque, como piden los vecinos de Pedro de Valdivia Alto.
El seremi de Vivienda, Carlos Arzola Burgos, lamentó que se malentendiera que se reactivaba el proyecto original de los 500 departamentos y aseguró que hoy se referirá al tema.

“Decisión ya tomada”

El 3 de mayo del año pasado en el diario EL SUR el entonces seremi de Vivienda y Urbanismo, Aldo Ramacciotti, aseguraba que “el proyecto de trasladar a las 500 familias es una decisión ya tomada que, difícilmente, se va a revertir”. También aseguraba que “el plan está en marcha y que durante el segundo semestre se espera licitar la construcción de las viviendas que se emplazarán junto a La Mochita, para permitir el avance del Plan Ribera Norte II”.
Días más tarde en “Cartas al director” se explayaría en que “para el gobierno no ha estado en ningún momento en discusión la alternativa de erradicar a estas familias fuera del sector”.
Añadió que “para este propósito se viene elaborando desde el año 2001, en conjunto con las organizaciones sociales del sector y la Municipalidad de Concepción, un plan de reordenamiento urbano y social, que involucra desde la calle Esmeralda hasta la calle Sanders, la regularización del sector actualmente habitado y su extensión hacia el sector contiguo, de propiedad del Serviu, con viviendas, áreas verdes y equipamiento comunitario para estas mismas familias. En tal sentido, las familias destinatarias de este proyecto son vecinos que actualmente residen en el área. En este contexto, la decisión del gobierno de consolidar a las familias en el área, responde al derecho y pertenencia que les reconoce el sector y no a razones cortoplacistas ni electorales como se ha señalado”.

Todo vuelve a fojas cero

Al concejal Christian Paulsen le inquieta que el gobierno reactive el proyecto de vivienda social en Pedro de Valdivia. Hay “desilusión y alarma”, dijo. Agregó que el acuerdo del año pasado fue densificar Pedro de Valdivia Bajo con edificios en altura y dejar el sector de la Costanera entre La Mochita y Sanders sólo para áreas verdes y recreacionales. “Nos vemos sorprendidos por la reincidencia en la posición primitiva, que vuelve a fojas cero todo lo planeado, discutido y argumentado en su oportunidad”, señala Paulsen.
El concejal Alvaro Ortiz Vera explicó que el acuerdo de fines de 2005 se justificó por la necesidad de “darle una nueva vuelta” al problema de los terrenos de Pedro de Valdivia, con el solo objetivo de entregar una mejor solución habitacional a los vecinos, al barrio y no perjudicar a la ciudad. Sin embargo, justificó el trabajo que actualmente hace “Vivo mi barrio”, para construir viviendas sociales en el terreno cuestionado.

Vecinos

La presidenta de la junta de vecinos número 32, Liliana Montecinos Alarcón, manifestó ayer su molestia porque indicó que los acuerdos con el Minvu no son construir viviendas sociales en los terrenos de La Mochita, sino de soluciones “mejoradas”, mientras que Sonia Guzmán Torres, de la junta de vecinos “Puente Viejo”, precisó que le parece muy bueno lo que prometen las nuevas autoridades de gobierno.
Sin embargo, señaló que las 479 familias llevan cinco décadas esperando por agua potable, alcantarillado y una vivienda con título de dominio. Manifestó su extrañeza porque el año pasado se les había asegurado que comenzaría la construcción de viviendas, que estarían listas este año, y ahora se les habla que estarán terminadas en 2009.

Revuelo

La reactivación de la iniciativa de viviendas sociales en los terrenos frente a Pedro de Valdivia causó revuelo en varios sectores de la ciudad, que habían quedado convencidos que el acuerdo Minvu-Municipio de fines del año pasado había sepultado definitivamente esa posibilidad.
El tema está siendo analizado por la Cámara Chilena de la Construcción, que se espera emita una opinión sobre el asunto. También se le consultó a la Embajada de Italia -a través del Consulado- sobre el convenio de 1992 que permitió la compra de este terreno.

*Diario EL SUR, viernes 15 de septiembre de 2006.

Polémica por terrenos

Seremi niega reunión secreta

* Carlos Arzola no aclaró ayer si se construirán o no viviendas sociales en terrenos donados por Agencia de Cooperación Italiana.


“Con este debate no se contribuye a hacer ciudad”, se quejó ayer el seremi de Vivienda, Carlos Arzola Burgos, quien pese a los insistentes requerimientos de EL SUR no accedió a otorgar una entrevista.
En breve conversación en la Intendencia, el seremi se mostró muy molesto por las publicaciones relacionadas al proyecto Pedro de Valdivia Bajo y aseguró que no hubo un acuerdo secreto con el municipio para detener el proyecto de vivienda social.
Señaló que lo único que hay es el desarrollo de diversos estudios por parte del programa “Vivo mi barrio” para mejorar el sector Pedro de Valdivia Bajo y que después se formará una mesa de trabajo.
No quiso responder sobre los compromisos del gobierno para construir 500 departamentos en las 10,9 hectáreas entre La Mochita y Sanders, que fueron donados por la Agencia de Cooperación Italiana el año 1992.
El proyecto fue comprometido por el ex Presidente Lagos durante una masiva reunión con los vecinos de Pedro de Valdivia Bajo en el gimnasio de la Escuela Diferencia Chile-España el 17 de junio de 2004.
En la oportunidad, Lagos aseguró que al término de su mandato se iniciaría la construcción de 500 viviendas sociales, y que para el 2007 todos los vecinos del sector tendrían título de dominio.
También el entonces ministro de Vivienda, Jaime Ravinet, explicó que de las 2.500 familias que habitan el sector, 1.540 lo hacían sobre terrenos fiscales.
Debido a la escasez de terreno disponible, la operación inmobiliaria del Serviu construiría 500 departamentos en La Mochita, para luego desocupar terrenos y reordenar el sector.
El compromiso gubernamental fue que entre 2004-2006 se destinarían $5 mil millones; entre el 2007- 2088 otros 3 mil millones, para totalizar una inversión pública de $8 mil 254 millones.

*Diario El SUR, sábado 16 de septiembre de 2006.

Aseguró intendenta Tohá

Sitio en P. de Valdivia es para vivienda



La intendenta María Soledad Tohá salió al paso de las declaraciones de dirigentes vecinales de Pedro de Valdivia Alto y de la Cámara Chilena de la Construcción que no quieren vivienda social en un terreno del Serviu ubicado entre La Mochita y Sanders, al asegurar que cumplirá el compromiso del Presidente Lagos, y que el destino de ese terreno es habitacional.
La autoridad reconoció que la postergación de este proyecto, anunciado para el año pasado, ha creado un “tremendo sentimiento de confusión” y ha frustrado las expectativas entre los vecinos de Pedro de Valdivia Bajo.
Afirmó que los anuncios realizados en 2003 y 2004 durante el gobierno del Presidente Lagos se cumplirán y que para ello pidió al seremi de Vivienda, Carlos Arzola Burgos, y al director regional del Serviu, Jaime Arévalo Núñez, organizar una reunión con la comunidad de ese sector.
“Nuestro compromiso es enfrentar las necesidades de vivienda propia y saneamiento” de títulos de dominio de los 3.500 familias que viven en el área, declaró.
Consultada por las 10,9 hectáreas de terreno de propiedad del Serviu que se ubican a orillas del río Biobío, entre la planta La Mochita y Sanders, indicó que “indudablemente el compromiso inicial es con un destino de vivienda”.
Ante la oposición del proyecto de 500 departamentos Serviu, María Soledad Tohá reconoció que “hay puntos de vista divergentes de cuál es la solución más adecuada”, sin embargo, señaló que la decisión final se tomará considerando en forma “prioritaria” la opinión de las familias de Pedro de Valdivia Bajo que están demandando una vivienda.

Dudas pendientes

El tema de los terrenos de Pedro de Valdivia es muy sensible para los empresarios inmobiliarios, que temen que sus propiedades del sector acomodado se devalúen si se construye un proyecto de vivienda social al otro lado de la avenida. Pese al compromiso del Presidente Lagos de que los 500 departamentos se comenzarían a construir antes del término de su mandato, un fuerte lobby realizado a mediados del año pasado logró que el Serviu postergara el proyecto que se viene arrastrando desde el año 1992, época en que la Agencia de Cooperación Italiana donó el terreno al gobierno para dar solución habitacional. Las presiones incluyen la vía judicial y propuestas de construir allí un parque o venderlo para financiar el programa social.

*Diario EL SUR. Sábado 23 de septiembre de 2006.